domingo, 27 de noviembre de 2011

mi primer experiencia

Hola les quiero contar una aventura digámosle “mi primer despertar sexual”  y esto es totalmente real en ese tiempo contaba con tan sólo 18 años de edad (actualmente tengo 27 años)
y me sentía madura para esa edad, tenia un vecino de de 28 años en ese entonces, que sacaba a pasear su perro todas las tardes en las áreas verdes de la unidad habitacional en donde vivía el no era especialmente guapo pero era educado y muy amablemente siempre saludaba, en alguna ocasión tenia yo que entregar un trabajo escolar y me dirigí al ciber café y grande va siendo mi sorpresa al verlo cerrado y por mi impotencia exprese un maldita sea en voz alta, y el al ver mi impotencia me pregunto que, que me pasaba le exprese mi situación y el me dijo con todo te gusto te ayudo yo tengo impresora en casa y así sucedió después de ese incidente me hice su amiga el y yo solíamos tener platicas sobre música deportes política todo lo que podíamos tener en común Las platicas eran tan frecuentes que a veces se tornaban en confesiones de su parte. Un día, por ejemplo, hablando sobre mis posibles candidatos me pregunto mi perfil de hombre y le dije que me gustaban los hombres afeitados, que usan traje, camisa, y corbata, y que se peinan con gel el pelo corto, casualmente era el perfil de el ya que el era abogado de profesión,
En fin transcurrieron un par de meses y nuevamente me encontraba en ciber café y al abrir una pagina vi con curiosidad que el anterior usuario había dejado abierta una pagina pornográfica donde una chica chupaba su miembro a un tipo mi instinto fue cerrarla pero al poco tiempo me dio curiosidad y la abrí nuevamente en esto escucho la voz de mi vecino que decía ¿hola bonita como estas? e instintivamente brinque y cerré la pagina el se rio y le pregunte que como estaba que estaba haciendo en el ciber y me comento que se había quedado sin tinta y que necesitaba entregar un expediente de un caso después de eso se despidió y yo seguí morboseando a mi gusto fue tanto mi gusto que acabe yéndome a mi casa a masturbarme para relajarme después de eso me quede con la curiosidad si mi vecino había visto la computadora y al siguiente día me lo encontré
Yo ¿viste ayer en el ciber qué era lo que estaba viendo?
El: No, nunca miro lo que hacen los demás.
Yo: Ok. Menos mal.
Pero lo deje pensando y así pasaron algunos días  yo cada vez mas pasaba las tardes viendo porno y masturbándome y crecía mas mi curiosidad por sentir que sentían las chicas al chupar un pene miraba con admiración como disfrutaban esas chicas al tenerlo en la boca
Una de tantas tardes me encontré al vecino y me pregunto ¿Por qué me preguntaste si yo había visto lo que tu estabas viendo en el ciber?
Yo: Porque … me turbe un poco
El: Ok, está bien. Si no me quieres contar no me digas  Como te dije, no soy un tipo muy curioso ni ando encima de la gente para que me cuente qué hace.
Yo: Está bien, te voy a contar, pero no le digas a mis papás ni a nadie, ni siquiera a tu esposa, tiene que quedar entre tu y yo porque si se entera alguien más me van a matar.
El: Ok, escucho.
Y  le conté  Estaba viendo fotos y videos cortos (de esos de 1 a 2 minutos) pornográficos que sentía mucha curiosidad
El: ¿Te masturbas luego de ver las fotos?
Yo: Sí, a veces, ¿está mal eso? Todas las chicas de mi edad lo hacen es malo?
El: no, no es malo es algo natural y no te preocupes tu secreto esta a salvo conmigo
Sonreí aliviada con esa respuesta pero con cierta pena aun pero eso rompió mas el hielo entre nosotros  y cada vez eran las preguntas mas abiertas y llego un momento en que mi curiosidad no pudo mas y me di cuenta que necesitaba probar lo que veía en pantalla masturbarme ya no era suficiente y tenia al candidato perfecto  me decidí jugarme las cartas y en una ocasión que me encontré en las áreas verdes surgió una conversación mas o menos así
Yo – ¿Ése líquido blanco y medio espeso que les sale a ustedes de la pija, es el semen?
El: Sí –contesto, un tanto sorprendido por la pregunta- ¿Estuviste viendo porno de nuevo? ¡Je!
Yo: Porque la mayoría de las veces las chicas que veo se tragan el semen, o se lo ponen en la boca y lo escupen ¿tu esposa lo hace verdad?
el: No te voy a contestar si mi esposa hace eso –contesto, un tanto enojado por el atrevimiento de mi pregunta- Pero muchas mujeres sí lo hacen.
Yo: entonces, si no me quieres decir si tu esposa hace eso, es porque se la bebe, sino no tendrías por qué ocultármelo.
El: ok, tú ganas, se lo bebe. Pero no le digas esto a nadie, ni menos a ella, porque me va a matar.
Yo: ok, trato hecho, dime, ¿es rico el semen y por eso se lo tragan?
El visiblemente entre confundido y aturdido me pregunta haber  a donde vas con todo esto
Yo ya sin mas ni mas le dije ¿puedo pedirte algo sin que te enojes? Pero es sólo entre tu y yo, por favor que no salga de acá.
El: ok, dime.
Yo: estuve pensando quiero seguir siendo virgen pero quiero darme algunos gustos antes. ¿Me dejarías probar tu pene y tu semen?
El  no sabía qué contestar. No esperaba esa pregunta. Quedo  perplejo. Tardo un poco en contestar y al fin dijo
El: déjame pensar, mañana te contesto. No es fácil para mí. Imagínate que estoy casado, me conoce toda la unidad, y si alguien se enterara de esto no sólo me divorciaría, sino que además me mandarían a la cárcel, no olvides que eres menor. Y todo esto, además, implicaría que pierda mi trabajo en el buffet y que todo el ambiente de abogados se me eche encima
Yo: ok, te lo pido a ti porque te tengo confianza y sé que no hay riesgos. Estoy curiosa y tengo ganas de saber qué se siente. Ya no quiero verlo más en fotos o videos, quiero saber qué se siente. No se me ocurre a qué otra persona pedirle. ¡Por fis, no te enojes!
El: no me enojo, lo pienso y mañana te contesto, pero ¿por qué no te empeñas en conocer algún chico y hacerlo tu por las tuyas? No lo tomes a mal. No te estoy rechazando, pero no me parece bien lo que me pides. Lo pienso bien y mañana te contesto.
Yo: pero quiero probar ahora, me da mucha curiosidad y muchas ganas. No quiero esperar a enamorarme de alguien para recién después probar. Las ganas las tengo ahora, mañana no sé qué pueda pasar. Además sé que tu no le dirías nada a nadie porque tu el primero en perjudicarse.
El después de de pensarlo un momento me dijo ok,  Te voy a dar a probar lo que me pides. Pero por favor que esto sea un pacto de sangre. No digas nada a nadie porque me puede costar muy caro.
Yo: ok, ¿y cómo hacemos?
El: Dame un momento voy por las llaves del salón de usos múltiples (el era parte de la mesa directiva de los edificios) Dile a tu mama que vas a ir al ciber.  En realidad, nos vamos a encontrar en la esquina y vamos para el salón a esta hora esta vacio y nadie se para por ahí ¿Te parece bien?
Yo: ok, ¿demoraremos mucho?
El: Presumo que una media hora, más o menos. Eso sí, yo entro primero, y tu después a los pocos minutos, porque si nos ve algún vecino entrando juntos a ese lugar va a pensar que es para hacer lo que realmente vamos a hacer, y eso es lo que no puede pasar.
Yo: ok emocionada no lo podría creer
fui a avisarle a mama, el por las llaves y ya estábamos en la esquina. Entonces, el comenzó a caminar hacia el salón de usos múltiples, Comencé a caminar atrás de el para que no pareciera que íbamos juntos. Entré  mirando a los cuatro lados que nadie me viera y me llamo a los baños del fondo Aun había luz solar a pesar de ser tarde
El: ¿estás lista?
Yo: Sí, estoy nerviosa, pero me gusta la idea de esconderme para esto.
El: ahora yo me quito el pantalón, el calzón, y vas a ver mi verga.  Ponte de rodillas, y te aconsejo que primero empieces por acariciarla, tocarla, y luego que sientas cómo es al tacto, sigues por darle unos besitos en la punta y en el costado, lamela un poco, así te vas acostumbrando al gusto. Y cuanto te sientas con suficiente coraje, abres la boca lo más grande que puedas y te metes la cabeza de la verga adentro, ¿ok? Juegas con tu lengua en la cabeza. Yo sé que son muchas cosas y capaz que no te acordaras, pero a medida que vaya pasando todo yo te voy repitiendo. No tomes a mal que yo te diga cómo hacerlo, lo que pasa es que si tu lo haces como a ti te parezca te puede dar asco, y tal vez te resulte todo desagradable. La idea es que te guste, ¿no es así?
Yo: sí, gracias por explicarme, no creo que me acuerde de todo, pero tu me guías (la idea de sentirme dominada me gusto)  yo después me sigo sola.
Y así empecé  Arrodillada frente a el con mi cara de colegiala (mitad niña, mitad adolescente) comencé a acariciarle la verga, la tocaba, primero con una sola mando después me relaje y utilice las dos manos Luego empecé a depositar suavemente mis jóvenes labios en la cabeza de su verga, y en el costado de la misma. La bese unas cuantas veces, Saque la lengua un poco y que la chupe, para acostumbrarme al gusto. Lo hice, y lamí su pene desde el tronco hasta la cabeza, porque así había visto hacerlo a una chica en un video en internet. Seguí unos segundos, hasta que en un momento me escondí la cabeza de su verga en mi boca. Abrí grande mi boquita juvenil y me engullí un poco más allá de la cabeza de su verga. Así empecé a chupar. Empecé con un mete y saca suave, despacio, como tratando de conocer un territorio que por primera vez estaba explorando, con la temerosidad y respeto que se tiene a lo desconocido. Trate de ir más al fondo  ya empezando a enviciarme con la pija pero se la sacó de la boca y empecé a toser. Había hecho una arcada por haberme atragantado.
El: tranquila, no te apures. Lo estás haciendo muy bien. No tenías necesidad de engullirla toda.
Yo: ok, disculpa, me perdí.
Me estaba gustando. yo misma estaba siendo la protagonista de aquellos videos tan excitantes que veía en el ciber. Me moría de ganas por chuparle las bolas, pero no quería hacer demasiadas cosas a la vez Con lo que estaba haciendo era más que suficiente para mi primera vez. A medida que seguía chupando, me la metía cada vez un poco más adentro, y más rápido. También me la sacaba de la boca y la lamía, y la volvía a besar, imitando a alguna de las actrices porno que vi. Así estuvimos unos 5 a 10 minutos, que para mí fueron súper excitantes. Entonces, Me dijo:
El: estoy por acabar, ¿cómo quieres probar el semen?
Yo: dámelo en la lengua, ¿te parece bien?
El: ok, pero sólo te voy a dar el primer chorro. La idea es que pruebes semen, no que te embarre la boca con él.
Yo: no, embárrame, lléname la lengua de semen.
EL: mira que te puedes atragantar.
Yo: no importa, lo quiero todo (toda engolosinada).
El: ok, pero no lo bebas hasta que yo no haya derramado hasta la última gota.
Me aviso que estaba por acabar, sacó su verga de mi boca y saque la lengua al máximo. Se empezó a masturbar y el semen empezó a salir a borbotones. Cinco chorros de semen bien blanco, espeso, viscoso, y caliente fueron a dar directamente a mi lengua, Una vez que todo el semen cayó en su lengua, me dijo que podía beberlo. Metí la lengua dentro de mi boca y trague la leche, con un saborcito saladito nada desagradable,  Luego que trague el semen, me pregunto:
el: ¿y? ¿qué te pareció?
Yo: está riquísimo todo esto de chupar la verga y tragar el semen. Tengo una calentura que no aguanto más. Llego a casa y me masturbare hasta el orgasmo
El: ¡Je! Vámonos rápido, antes de que alguien nos vea. Primero sal tu, y espérame en la esquina, en unos minutos salgo yo.
Yo: ok, así le hacemos.
Y esto mismo lo repetimos en algunas ocasiones mas incluso tuvimos juegos de bukkake ya se los contare en algunos próximos relatos espero les haya gustado besitos
tu vecinita

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